Hoy tuve la oportunidad de
ver en el Auditorio Rafael Nieto, siendo parte del Ciclo de mujeres Directores
de Cine, la película We Need To Talk
About Kevin o por su traducción en español Tenemos Que Hablar De Kevin.
We need to talk about kevin,
es una película basada en el libro con el mismo nombre, escrito por Lionel
Shriver. Fue dirigida por Lynne Ramsay, producida por Jennifer Fox, Luc Roeg y
Bob Salerno. El encargado de adaptarla a la pantalla grande fue Seamus
McGarvey. Múltiples compañías se encargaron de producirlas; BBC Films, Lipsync
Productions, UK Film Council, Oscilloscope Laboratorie, por mencionar algunas.
Música elegida por Jonny Greenwood. Distribuida por Artificial Eye el 12 de
Mayo del 2011 en el Festival de Películas de Cannes y el 21 de Octubre se
distribuyó por todo el Reino Unido. Se estima que el presupuesto fue de
$7,000,000 de dólares y se da un aproximado de recaudación con una cifra de
$7,493,626.
La historia narrativa está plasmada
en retrospectiva; dando pistas sobre lo sucedido con pequeños flashbacks y al
mismo tiempo, está desenvolviéndose la
trama en el presente. La trama nos presenta a Eva Khatchadourian (Tilda
Swinston) una famosa escritora de viajes, que en un punto de su vida fue
exitosa, quién tiene un hijo llamado Kevin (Ezra Miller) con el cuál nunca ha tenido una
relación de paz y amor, siendo así, que han tenido agresiones mutuas y se han
mostrado su desprecio de que Kevin era un infante. Esta llega a empeorar con el
paso del tiempo, cuando Kevin comienza a presentar síntomas de un trastorno
psicológico grave, que puede poner en riesgo la integridad y armonía de su
familia. Por lo cual, Eva tendrá que detectar la razón de su extraña actitud.
Una película que me gusto
bastante, por todo lo que la estructura narrativa conlleva. El hecho de que
esté contada en retrospectiva le da un toque más especial, al ponerte a pensar
desde la primera escena lo que significa –Al ver a Eva viendo con una mirada
perdida a lo que hay en ese balcón, que se descubre al final de la película- a
lo largo del film, vemos y entendemos muchas cosas importantes en la trama por medio
de esos flashback, he aquí la razón de que sean tan importantes.
En cuanto a los personajes,
me encantaron las actuaciones de los dos principales Eva, interpretada por
Tilda Swinston, una actriz nada multifacética pero sin duda sus actuaciones
siempre son tan sólidas. Primero, la expresión que tuvo a lo largo del Film fue
casi siempre la misma, denotando tristeza, depresión y soledad pero, nunca se
le ve llorando o sintiendo algo más que eso, escondiendo su felicidad o mostrándola
de una manera tan sutil que te llega a sorprender que su expresión cambie por
unos segundos volviendo a ser estática. Simplemente me encanto el modo que se mostró
de una persona sumisa peor con una fuerza de voluntad increíble, que pese a la transición
que tuvo de primero estar arriba y luego súbitamente estar en el fondo de un
día para el otro, se mantenía viva, que es lo más importante.
Por el otro lado, el otro
actor que me sorprendió por su grandiosa actuación fue Ezra Miller que
interpreta al otro personaje principal de la trama Kevin, no pudo haber un
actor al cuál le quedará tan bien el papel de sínico, psicópata y creo que
logró portar el papel de villano de una manera excelente, porque, viendo las
reacciones de muchos, logro ganarse el odio de la gente, algo, que no muchos actores
o actrices que interpretan villanos pueden lograr. Sus expresiones faciales
denotaban indiferencia sobre lo que pasaba, su sonrisa era perversa y sus ojos
escondían algo, por lo que mucho podían pensar de lo que realmente este chico,
Kevin, tramaba.
Siguiendo con el análisis de
los personajes y basado en la perspectiva psicológica de Sigmund Freud sobre las etapas de crecimiento que podemos
adjudicar que claramente Kevin tuvo, podemos decir que en la “Etapa Anal” (la
cual comprende la edad de 2-3 años) en la cual se supone que el niño comienza a
controlar su esfínter o no para estar más cerca de su madre, realizando
pequeñas asociaciones, lo cual Kevin usa a su favor manipulando a su madre,
teniendo su atención pero al mismo tiempo demostrándole su desprecio.
En cuanto a la dinámica del
film, fue un poco complicada y aún lo es, el interpretar todo lo que la
directora así como la novelista querían decir. Lo primero que note fue el hecho
de la atribución de elementos en los saltos de tiempo, por ejemplo, en la
escena en la que Kevin mata a la mascota de su hermana vemos que en el pasado
como Eva se da cuenta de ello poniendo una expresión de sorpresa que al momento
de regresar al presente la vemos lavándose las manos llenas de pintura roja,
significando lo que realmente sucedió con la mascota.
También los elementos simbólicos
mostrados fueron una parte importante; Los niños pidiendo dulces simbolizando
el terror que Eva le tenía a su hijo, viéndolo como realmente era, un monstruo.
El ver a personas que sufrieron una pérdida el día del accidente mostrando su
desprecio y desaprobación por la existencia de Eva. El hecho de que Eva guarde
la ropa de su hijo y haya transformado su cuarto en una clara adaptación al de
Kevin, un claro recordatorio de que es lo único que le queda y que así como la
hizo sufrir y odiar, le dio una esperanza arraigada a que siguiera viva en un
mundo que no es de ella.
Una película que nos muestra
como la mente humana puede llegar a deteriorarse desde los primeros años de
vida que si no es tratado con tiempo puede llegar a consecuencias fatales.
Recomendable para todas las
personas que realmente quieran conocer un poco más a fondo, el comportamiento
de los niños que llaman psicópatas así como ver el amor tan grande que una madre
puede tener por sus hijos, aparte de que tiene un buen soundtrack, una
narrativa increíble y actuaciones sólidas. Pueden conseguirla en las tiendas de
renta de vídeos y si no la llegaran a encontrar podrán verla en internet.
Deberían distribuir más películas como esta en nuestro país para que nosotros
como jóvenes ampliemos más nuestros horizontes al ver y elegir películas. “Judge
For Yourselves”