La temporada 4 de una de mis
comedias favoritas terminó hace dos semanas. Que cada vez nos muestran
capítulos muy graciosos y nunca se tornan aburridos que a comparación de muchas
otras comedias ya hubiera llegado un punto en el que sólo aburre.
Modern Family nos cuenta la
historia de tres familias que aparentan ser normales como las otras pero en
realidad no cada una tiene su característica en particular, que la hace romper
el típico estereotipo americano de las familias de Estados Unidos.
En esta temporada se unió un
nuevo miembro a la familia de Jay, Gloria y Manny con la inclusión de Fulgencio
“Joe” Pritchett al que cómo se puede notar que hubo una pelea y discusión al
ponerle el nombre al bebe al ser Gloria de Colombia y Jay de Estados Unidos.
En cambio con la familia de
Phill, Luke, Claire, Alex y Haley, Haley es expulsada de la Universidad y sus
padres de manera inmediata la traen de vuelta a casa, vemos la transición que
tiene ella en su personaje al ya no actuar de manera inmadura y ser más
consciente de sus decisiones y acciones. También como en otras temporadas vemos
las travesuras de Luke que ya está
creciendo y de Alex la chica cerebrito que tiene bien claras las metas en su
futuro.
En cuanto a la familia de Cameron
y Mitchell que ahora enfrentan la transición de Lily a una chica que va a
Kinder Garden ahora y está creciendo poco a poco de una manera acelerada al ser
más consciente de las cosas y como siempre imprudente como ninguna . Nos
muestran las inseguridades que siente Cameron cuando el ex novio e Mitchell
comienza a tener más contacto con él. Pero nos muestra cuanto ama Mitchell a
Cameron.
Una serie graciosa y original
como ninguna que en estos capítulos en particular cada que termina un capítulo
se escucha el voice off de alguno de los personajes narrando lo que aprendieron
en ese capítulo y la atribución que cada uno le da a ellas. Dejándonos con una gran enseñanza que
podemos emplear con nuestras familias.
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