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viernes, 7 de abril de 2017

Crítica: Shut In – “A Psychological Thriller Who Stay’s Vegegative Throughout”

Título: Shut In (Presencia Siniestra).
País: Francia, Canadá.
Estreno: 16 de noviembre del 2016.
Productora: Lava Bear Films, Canal +, Ocs, Cine+
Distribuidora: EuropaCorp.
Director: Farren Blackburn.
Fotografía: Yves Bélanger.
Guion: Christina Hodson.
Género: Terror Psicológico, Thriller, Horror. 
Reparto: Naomi Watts, Oliver Platt, Charlie Heaton, Jacob Tremblay, David Cubitt, Clémentine Poidatz.

Parece que el último trimestre del año pasado en el mundo cinematográfico en el género de terror estuvo muy deficiente, con pocos títulos y los que hubo como Diabolical (2016) o La Reencarnación (2016), fueron deficientes y el tráiler que prometía mucho termino decepcionando y esté es el caso de uno de ellos.

Shut In nos cuenta la historia de Mary (Naomi Watts) una psicóloga infanil que vive aislada en su casa del bosque junto con su hijastro Stephen (Charlie Heaton), un adolescente que se encuentra en estado vegetativo desde el accidente de coche en el que se murió su padre. Mary decide trasladarlo a un centro especializado en el cuidado de pacientes con ese mismo estado. Sin embargo, antes debe prepararse para una gran tormenta que se acerca, después de que la misteriosa desaparición de uno de sus pacientes Tom (Jacob Tremblay) comience a cambiar su vida.

Otra cinta que logro decepcionarme más que gustarme, como siempre, uno de mis errores es ver un tráiler, ya que siempre lo pintan como lo mejor que puede existir y solo se encargan de rescatar las buenas escenas, un claro ejemplo es el de este, ya que un gran tráiler, una pésima película.
La historia prometía bastante, una historia de una madre sobreprotectora y entregada con su hijo en estado vegetal que comienza a ser acechada por una extraña fuerza maligna. Podría resultar inquietante ¿no?, sin embargo, en un abrir y cerrar de ojos el plot twist es inevitable y nos muestra la verdadera esencia de la película y es una bastante mala.

¡OJO! SPOILERS DEBAJO
Resulta estúpido que un adolescente se haga pasar por un paciente en estado vegetal y su madre ni nadie se dé cuenta de ello, hasta que sus verdaderas intenciones se descubren y vemos una parte interesante en la trama; el complejo de Edipo, que, aunque el joven no está enamorado sexualmente de su madre, él demuestra quererla para él solamente de una forma egoísta y esta su obsesión que piensa matar al que probablemente sería su sustituto.

Sé qué ya les conté una parte esencial de la película, pero era necesario mencionar lo inconstante y ridícula que parece. Lo que prometía ser un thriller espectacular, termina siendo uno sin inspiración, predecible, mediocre y con una trama desbalanceada.
Las actuaciones a destacar son las de la gran actriz Naomi Watts, que, a pesar de estar en una cinta muy mala, ella entrega todo en el papel y hace lo que puede con el mismo, entregándole un atractivo aparente a un punto sin retorno. Los demás actores como Tremblay, que había entregado una actuación espectacular en The Room (2015) y empezó su declive en Before I Wake (2016), aquí teniendo pocos diálogos, limitándose a una participación dominante y encantadora. En cuanto a la de Heaton es de las menos creíbles de todas.

La fotografía está cubierta de una luz muy tenue cubierta con el blanco de la nieve que recubre los paisajes nevosos y unos cuantos solitarios, pero que no logran destacar demasiado, y hasta podría pasar desapercibidos. No destacan mucho y solamente está bien contextualizada y filmada.


Shut In o Presencia Siniestra, es un engaño desde el título de la traducción en español, porque no es como te lo pintan y aunque pudo haber sido muy buena en el mundo del thriller, los clichés no dejan de hacer actos de presencia y aunque Watts es fabulosa como actriz, esté podría haber sido de los más difíciles. Yo no se las recomiendo, pero “Véanla y juzguen por ustedes mismos”. 

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